Con la valiosa contribución de directoras y directores de los cuerpos estables de música, canto y danza, presentamos aquí una propuesta de escucha.
En primera persona, maestras y maestros que tienen a cargo la dirección artística de los cuerpos artísticos oficiales contribuyen a armar un índice de distinta naturaleza musical con una enorme riqueza sonora.
Haciendo su aporte a esta sección, el maestro Gustavo Maldino, director del Coro de Cámara de la Provincia de Córdoba, propone algo que en principio puede resultar un tanto extraño: música de John Dowland, uno de los grandes compositores del Renacimiento inglés, interpretada por Sting “con una calidad interpretativa maravillosa y el propio Sting en el laud, cosa que es muy difícil”, opina el maestro.
Dowland nació en 1523 y murió en 1620. “Compuso sobre todo música para laúd y después a cuatro voces -comenta Maldino-. Con el Coro de Cámara hemos interpretado a Dowland, cuya música es curiosa y a la vez encantadora”.
El director también propone escuchar uno de esos monumentos sonoros de la historia de la música: la “Sinfonía N.2 -Resurrección-“, sinfonía coral del compositor austríaco Gustav Mahler. En esta ocasión, la obra está dirigida por Leonard Bernstein, el director de orquesta preferido del maestro Maldino. Bernstein dirigió el ciclo de nueve sinfonías de Mahler con la Orquesta Filarmónica de Viena, agrupación con la cual el mismo Mahler estrenó varias de sus sinfonías. “Es una obra que varias veces tuve oportunidad de preparar coralmente, es una obra para regodearse escuchando y viendo a Leonard Berstein”, asegura Maldino. “Panzada de música”, sintetiza el maestro.
Para terminar su tríptico, Gustavo Maldino propone una pieza compleja y en la misma medida atrapante. Es “Lux aeternam”, de György Ligeti, uno de los grandes compositores en la música del siglo XX, popularmente conocido por las bandas sonoras de las películas 2001: Una odisea en el espacio y El resplandor, del director de cine Stanley Kubrick. Esta es la versión del Coro el Cámara de la Provincia, interpretada a ocho voces, en la Iglesia del Corazón de María, en Alta Córdoba. “Si tiene espíritu de aventura, introdúzcanse en este Lux aeternam de Ligeti”, es la propuesta.