Programas de Beethoven y Rossini en instalaciones de la UNC

“Buen Dios, aunque he tratado de escribirte esta música sacra, ya sabes que yo nací para la ópera cómica. Un poco de ciencia, un poco de corazón, eso es todo lo que soy capaz de ofrecer. Así que te ruego que la bendigas y me garantices el paraíso”, confiesa Gioacchino Rossini.

El célebre compositor de ópera justifica de esta manera su Pequeña misa solemne, una pieza compuesta poco antes de morir y mucho tiempo después de haber dejado la composición.

La versión de la Pequeña misa solemne que se escuchará a cargo del Coro Polifónico de Córdoba, el viernes 3, a las 20, en la Sala de las Américas de la Ciudad Universitaria, es para dos pianos e intérpretes solistas, con Lucía González (soprano), Emilia González (contralto), Exequiel Ibarra (tenor) y Ariel Suárez (bajo), Andrea Mellia y Marina Acuña (piano) y Fabricio Rovasio (órgano-armonio), bajo la dirección general del maestro Camilo Santostefano.

La obra sorprende por los frutos de gran expresividad que se manifiestan en diversos estilos y posibilidades. Con una instrumentación mínima, la mayor parte se la llevan las voces solistas y el coro.

La misa tiene momentos destacables como el Sanctus, a capella, o el Kirie Eleison, que combina ma

gistralmente melodías diferentes, y el Agnus Dei del final, dedicado a la tesitura de contralto.

La entrada es libre y gratuita, por orden de llegada, por lo que no es preciso retirar las ubicaciones anticipadamente.

Ludwig van Beethoven es uno de los grandes renovadores en la historia de la música. Su vehemencia, creatividad y vuelo creativo influyeron significativamente sobre la música de cámara, el concierto, la sinfonía y la música para piano.
Dos estudiosos de la obra de Beethoven, los alemanes Georg Kinsky y Hans Halm, publicaron en 1955 La obra de Beethoven: catálogo temático-bibliográfico de todas sus composiciones terminadas, del que se despr
enden 138 piezas a las que Beethoven asignó un número (“Opus”) además de otras 205 sin numerar.
El próximo sábado 11, a las 20, la Orquesta Sinfónica de Córdoba interpreta la Séptima Sinfonía del gran compositor alemán -“la apoteosis de la danza”, según la definición que de ella dio Richard Wagner-, en un concierto a realizarse en el Centro Cultural Paseo de la Nueva Andalucía (UNC), en Duarte Quirós 107, bajo la dirección del maestro JongWhy Vakh.El programa incluye la Obertura de Egmont y la Obertura de Las criaturas de Prometeo, también de Ludwig van Beethoven.

“La Séptima sinfonía de Beethoven es la alegría, que con una omnipotencia orgiástica nos lleva a través de todos los espacios de la naturaleza, de todas las corrientes y los océanos de la vida, dando voces de alegría y consciencia, por donde caminamos al ritmo audaz de esta danza humana de las esferas. Esta sinfonía es la apoteosis de la danza, la mejor realización de los movimientos corporales en forma ideal”, es la célebre síntesis de Richard Wagner acerca de la obra, que el público tendrá la ocasión de disfrutar en esta función con entrada libre y gratuita.