Alrededor de los fantasmas del teatro hay varias historias. Este fin de semana, algunas de ellas serán acompañadas con música para banda de concierto.
Según un relato publicado en la revista Escenario (Córdoba, 2000), la encargada del departamento de Arte Dramático, que funcionaba a la altura de la cazuela, Kantuca Fernández y la asistente, Bett Avalos, se retiraban de la oficina cuando se les apareció un hombre que no supo dar respuesta ante la pregunta sobre qué necesitaba y se retiró escaleras abajo. Al mismo tiempo el maestro Carlos Giraudo, director titular de la Orquesta Sinfónica de Córdoba entre 1983 y 1999, subía por las mismas escaleras. Cuando las mujeres le preguntaron al maestro si conocía a ese hombre, el notable director les aseguró que él no se había cruzado con ningún desconocido.
En la misma nota, el eminente director de museos, Víctor Manuel Infante, creador del Museo del Teatro y de la Música Cristóbal de Aguilar, relató que los hijos de Cirilo Grassi Díaz, director del Teatro Colón, vieron la imagen de su fallecido padre caminando por un pasillo de este teatro cuando vinieron a Córdoba para donar una colección de batutas que perteneció a Cirilo Grassi Díaz.
Cuenta la historia que una mujer se presentaba en octubre durante cerca de 10 años, vestida de luto y con un ramo de flores. La mujer se sentaba en la platea, lloraba durante toda la función y al retirarse dejaba las flores y un pañuelo en la butaca de al lado. Una historia similar se dio durante muchos años en el palco 19, en donde alguien dejaba un ramo de flores y una tarjeta unida al ramo con la leyenda “¿Porqué te fuiste? Te extraño”.
El centenario
El 26 de abril de 1991, el diario La Voz del Interior abordó el tema en un gran despliegue periodístico con motivo del 100° Aniversario del coliseo. Allí se habla de la recurrente visión del espíritu de Rubén Ferreirós, gran director artístico de la Orquesta Sinfónica de Córdoba, que solía usar una capa negra. Solamente dos músicos y dos técnicos teatrales alzaron el féretro del maestro hasta su última morada.
Entre el gremio de los técnicos, especialmente aquellos de la “vieja escuela”, la nota cuenta que Rafael Grisolía (padre), un histórico de la caja escénica, solía ocupar su habitual silla en el escenario desde donde vigilaba el desempeño de sus aprendices técnicos. Grisolía fumaba unos habanos marca Avanti, tanto en vida como en la esfera sobrenatural, según las versiones. “Cuiden el teatro”, dijo Grisolía en su lecho de muerte, afirman allegados al técnico teatral.
“Fantasmas del teatro”, Banda Sinfónica de la Provincia, Comedia Infanto Juvenil y Comedia Cordobesa, dirección general de Andrés Acosta. Sábado 30 y domingo 31, a las 19. Localidades a un valor de platea 800 pesos, cazuela, tertulia y paraíso, 500 pesos; teléfono 414-3412.