En el marco del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, el Teatro Real presenta esta pieza protagonizada por Hugo Kogan,quien a su vez la dirige junto a Roque Basualdo.
Esta obra multipremiada y reconocida en el mundo llega a nuestra ciudad, con una única función a realizase el viernes 24 de marzo a las 21 hs. en la sala Carlos Giménez, con entradas sin cargo a retirar en boletería del Teatro Real.
Sobre la obra
Desde el año 2009 a la fecha, esta versión de la Compañía La Granada de Mar del Plata- Argentina, ha recorrido distintos festivales en España, Francia, Alemania, Chile, Paraguay, Venezuela, Uruguay, Bolivia, Colombia y Argentina; además Hugo Kogan por este trabajo ha cosechado premios a la trayectoria y como actor en Canadá, Brasil y en nuestro país.
“Se acabó la época de los matones a sueldo, de los grandes psicópatas de la tortura, llegó la época de los ideólogos, de los filósofos de la libertad. Una nueva religión aparece y nace, entonces, una nueva patología social”.
Son buenos y lindos los nuevos líderes intelectuales de la nueva derecha. En nuestro país, una nueva derecha ocupa el lugar de la inteligencia de los capitanes de la industria y las multinacionales. Está surgiendo hoy la posibilidad de reemplazar a los dictadores por esa nueva inteligencia para la dominación.
Nuestro país a sufrido durante la dictadura una de las patologías sociales más graves y difíciles de diagnosticar. No había antecedentes en la psiquiatría mundial de este nuevo fenómeno social.
Un grupo de hombres y mujeres se dedicó a raptar niños ajenos como producto del “botín de guerra”. Una nueva secta de hombres “normales” se dedicaba a raptar los hijos de militantes caídos durante la represión, asesinando a los padres y cambiándoles la identidad original por otra.
Estos monstruos argentinos tenían una filosofía que era apoyada en forma cómplice por una gran masa gris “Astizforme” silenciosa. No sólo asesinaban o eran cómplices directos de asesinatos, sino que además justificaban los raptos con una nueva ética. Eran los nuevos “papás buenos”. Los “salvadores” de niños del “infierno rojo“. El fenómeno de los raptos de niños nos hizo famosos en todo el mundo.
Siempre alguno de ellos es “noticia” cuando son descubiertos por la implacabilidad de una “ética opuesta“: La de las madres y abuelas de Plaza de Mayo y de las organizaciones de los derechos humanos. Nunca imaginaron que iban a ser perseguidos hasta el último de los rincones del mundo para “rescatarles” sus nietos robados. Es que no conocían el código de la “ética opuesta”.
De esta falla “ética”, que contó con tantos cómplices…..“
Dijo la Crítica
“… Este trabajo que pone en escena Hugo Kogan es grande, la expresividad de este actor, logra llegar en un tono alto, que parece que tendrá que ir a menos, pero logra llegar a unas cotas elevadísimas de tensión que hacen al publico mantenerse atados necesariamente a ese hilo argumental, el actor y el trabajo valen….”
La República Cultural – Madrid – España. Mayo 2010
“… Una magistral puesta en escena, con una interpretación excepcional e inolvidable del actor Hugo Kogan. Una representación perturbadora sobre un escenario desnudo, pero, extraordinariamente intenso….”
El Periódico de Jaén – España. Junio 2009
“… El Argentino Hugo Kogan maneja con destreza todo tipo de registros
dramáticos, capaz de la carcajada y el sobrecogimiento más extremos, además de mantener muy bien la tensión de la obra. Se han apagado las luces y el aplauso ha sonado atronador…..”
Nueva Gomorra – Andalucia – España. Julio 2009