Del 8 al 11 de diciembre, entre las 18 y las 22.30 hs, se realiza la segunda edición de la Feria Provincial de Artesanías en el Centro Cultural Córdoba (Av. Poeta Lugones 401) con entrada libre y gratuita. Más de 60 artesanos de toda la provincia participan de este encuentro con una amplia variedad de productos.
Cuchillería, soguería, marroquinería, textil, juguetes de madera, indumentaria, almohadones, alfombras, fieltro, cerámica, velas, telar, cestería y encuadernación son algunos de los oficios y artesanías que están presentes en la feria.
Durante cuatro días, artesanos y artesanas seleccionados de toda la provincia participan con productos para exhibición y venta en las instalaciones del Centro Cultural Córdoba. Además, la Unión de Artesanos Independientes de Córdoba (UDAIC) tendrá un espacio institucional en el cual al menos 25 de sus artesanos afiliados también exhibirán y comercializarán sus productos.
El evento Organizado por el área de Artesanías de la Agencia Córdoba Cultura, se propone como un espacio de encuentro e intercambio de saberes. Donde artesanos de diferentes rubros y especialidades de la Provincia de Córdoba, se reúnen para visibilizar su producción y transmitir sus conocimientos a través de charlas y actividades.
Por otra parte, el viernes 9 y sábado 10 a partir de las 20, la música de cámara se hará presente en el marco de la feria de la mano del ciclo Pequeños conciertos académicos en el cual distintas agrupaciones de la Orquesta Académica Juvenil del Teatro del Libertador brindarán conciertos gratuitos. En tanto el domingo 11, el cierre estará a cargo del Cuarteto del amor. Las entradas se retiran cada día a partir de las 18 en la boletería del Centro Cultural Córdoba.
Igual que en la 1° edición, este año participa UDAIC (Unión de Artesanos Independientes de Córdoba), con un espacio para 25 artesanos.
Participan de este espacio las siguientes marcas y artesanos/as : Shila; De la tierra, telar; Mi.m.arte; MB Ropa Artesanal; María Griselda García; Miripú peluches sustentables; Silvia Robles; Gustavo Pereyra; Un fuego shibori ; Molaquemola; Taller Luisa Córdoba; Cielo al revés; Cecilia Elina Marquez; Ernesto Defant; Quetzal, Indumentaria Artesanal; Lilanitas; Artemisa; Taller Na guará; El Taller, Arte en Metal; Silvia Graciela Mignaton; Saya; Dalila Rosa Ibarra; Alejandra Aranguren – Diego Montoya Delgado y Yuspe Textil.
Alcira, símbolo del oficio
María Alcira López es una referente entre los artesanos a nivel provincial y nacional. Alfarera de oficio, nació en 1918 en Mina Clavero, más precisamente en la zona próxima al Puente del Cura. Para ella, todo comenzó casi de casualidad cuando se casó, a los 17 años, con su marido Jesús Tomás López. Debido a la pobreza extrema en la que vivían no tenían elementos de uso cotidiano para preparar los alimentos; por eso, el que luego sería su trabajo surgió a partir de la necesidad de generar objetos: a su primera olla la hizo tan gruesa que el agua tardó casi un día entero en hervir.
El proceso de elaboración de estas piezas se realiza a mano, sin moldes: desde la recolección de la arcilla en los arroyos y ríos de la zona hasta la quema con leña, tal cual lo hacían los pueblos originarios que habitaban la región. De a poco, Alcira aprendió a modelar ollas, cántaros, jarros, platos y toda clase de objetos utilitarios y transmitió, junto a su esposo, este noble oficio a sus 15 hijos a quienes, con instinto de madre, se había propuesto sacar de la pobreza canjeando cerámica por ropa y alimentos.
Alcira comenzó a vender a la vera de la ruta sus productos a los turistas. Jesús buscaba la arcilla y los chicos también ayudaban hasta que comenzaron la escuela, lo que para ella fue una satisfacción. Ni el frío de las Altas Cumbres, ni las largas distancias o la escarcha lograron ser obstáculos insalvables. Los años pasaban y la mayoría de los integrantes de la familia trabajaban aumentando la producción de objetos por lo que decidieron participar en exposiciones tradicionales en Cosquín, Entre Ríos, Rosario y Buenos Aires. En varias oportunidades fue invitada a participar de otras importantes ferias y exposiciones en las cuales obtuvo premios y reconocimientos por sus obras.
Actualmente, su hijo Atilio es el único que continúa el legado con su taller ubicado en el mismo lugar donde sus padres comenzaron. Desde allí recorre ferias y exposiciones por todo el país y ha recibido numerosos reconocimientos y premios por su labor. Atilio transmite a sus hijos este oficio, que ya es una herencia familiar, y ellos, con orgullo, continúan este saber ancestral heredado.
En el 2010, a pocos días del fallecimiento de María Alcira López, la Secretaría de Cultura de la Provincia de Córdoba inauguró un salón de arte con su nombre en la Casa de Córdoba en Buenos Aires en homenaje a quien rescató la técnica utilizada por los Comechingones para fabricar objetos de cerámica sobre los cuales sostenía: “No puedo creer que de la tierra salgan tantas maravillas. No hay dos piezas iguales porque la mano traza una huella distinta en cada oportunidad”. Su legado sigue vigente plasmado en un paisaje inigualable.