Entrevista a las coordinadoras de “Ensamble Creativo”, las licenciadas María Angélica Alvaro y Graciela Martinez Ghirardi: cómo derrumbar mitos sobre la vejez y sus (im) posibilidades.
En este primer encuentro se realizarán actividades de selección a los postulantes los días jueves 30 y viernes 31 de mayo de 10 a 13 hs. Para poder participar se deben inscribir llamando al tel: (0351) 4343637 en el horario de 09:30 a 16:30 hs los días martes 21, miércoles 22 y jueves 23 de mayo.
La aparición de pelos grises, o un bastón compañero y seguro, o ese color amarronado-verdoso que los años pintan en los ojos de las personas son signos de historias, de miles de cuentos, de abrazos, de enojos y aprendizajes condensados en huellas corporales.
El Ensamble es disparador de muchas miradas, pero nos detendremos en algunas: de volver a hablar de los museos abiertos, flexibles, empáticos y con ganas de abrazar a la comunidad.
Y, también o como consecuencia, esta bella e inteligente cuestión de reconocer y propiciar un espacio creativo en donde los adultos mayores “llevan adelante la batuta”. Junto a la Lic. Mariel Tarca, las licenciadas llevan adelante un proyecto que crece.
— ¿De qué se trata ensamble creativo?
— Graciela: El ensamble creativo es un proyecto que empezó en el 2016 con el objetivo de abrir el museo a la comunidad desde dos sentidos: involucrando activamente a un grupo etario que, generalmente, en las instituciones, los museos, están involucrados de manera pasiva. La oferta para personas mayores es para “hacer”, una actividad para aprender.
Nuestra intención es involucrar al adulto mayor pero desde toda la riqueza que tiene, toda la experiencia que puede sumar a la institución, por la experiencia de vida (…) recuperar los valores que tienen: el trabajo, el compromiso, la creatividad. Básicamente lo que nosotras miramos, dónde ponemos el foco o esperamos de ellos. Involucrar también al resto del público con las actividades que desarrollamos con ellos. Para eso nos reunimos, semanalmente, y planificamos actividades para el público
— ¿Cuáles son estas actividades?
— Graciela: Son muy variadas. Desde el primer año hasta el día de hoy, fueron cambiando muchísimo porque tienen que ver con los intereses de la institución y con los intereses de ellos. Y también del público. El primer año, apenas sumamos al grupo, imagínate que hay un grupo muy diverso (tenemos arquitectos, psicólogas, amas de casa, músicos conforma un grupo muy rico, con muchas miradas. En ese primer año, obviamente, había mucha gente que nunca había participado de la vida de un museo, sí como visitante, como público, pero no adentro de la institución, involucrados en la misma.
Entonces, implicó capacitarlos, primero. Y después de eso, hicimos un estudio de público con ellos. Y de ahí ver realmente cuáles eran los intereses de la gente y cuáles tenían que ver con los nuestros.
El primer año, trabajamos con obras que estaban exhibidas en la colección específicamente y, también, acercar el reglamento, buscar que no sea tan estricto ni tan prohibitivo. Lo hicimos con actuaciones, con canciones, etc.
El segundo año, nos había quedado pendiente en las encuestas a los públicos: el interés de conocer la historia de esta casa. Y no teníamos ningún espacio que contará eso, sí lo habíamos relatado en las visitas guiadas.
Pero la gente que venía no tenía una foto de la época, por ejemplo (…) Hicimos durante todo el año un trabajo de investigación en el que abarcamos varios ejes como el contexto en donde se construyó esta casa, el barrio, las costumbres de esa época, la arquitectura, etc.
Con ese trabajo hicimos visitas guiadas, recorridos por el barrio de Nueva Córdoba recuperando puntos específicos, de interés, por el parque Sarmiento también y en la casa. Y como “broche de oro” fue hacer una muestra que está hasta el día de hoy exhibida que se llama “Final abierto, la casa grande” que es así como la llamaba la familia entre 1890 – 1930, abarcamos ese periodos.
Y el año pasado tomamos el tema anual el Día Internacional de los Museos, en ese caso era Museos y Comunidades. Lo que propusimos fue una serie de charlas abiertas al público que también surgieron de los comentarios de las personas en las visitas guiadas o en los libros de visitas o las encuestas. Charlas al público relacionando el arte con otras cuestiones, como el Arte y la mujer, el Arte como calidad de vida, etc.
Trabajamos mucho sobre la vejez, la importancia de envejecer activamente, los derechos (…) el año pasado también tuvimos una participación en Porota Vida en Radio María, tuvimos dos participaciones de dos programas que hicimos con los ensamblados.
A este respecto, las coordinadoras resaltan la figura de Sol Rodríguez, comunicadora social, figura detrás de Porota Vida como de tantos otros proyectos llenos de vida en relación al transitar de los años, envejecer: “Cuando empezamos con el proyecto, ella era la directora del Espacio Illia, nunca habíamos trabajo para personas mayores en el museo. Buscamos una referente en el tema y la buscamos a Sol. Y desde ese primer día, ella es como un libro abierto, es muy generosa, nos ayudó muchísimo a darnos cuenta sobre qué cosas tenemos que trabajar, en la etapa de vida en la que están ensamblados (….) ella permitió que los ensamblados organizaran el programa de radio”.
Por su parte, Sol Rodríguez comparte su mirada sobre el Ensamble: “la experiencia del Ensamble es una de las pioneras en Córdoba, lo que está haciendo el Museo con el proyecto del Ensamble es generar un espacio de encuentro entre personas mayores, pero no para que estas personas sean beneficiaras de una determinada actividad. Por el contrario, es para que ellas gesten, coordinen, propongan, lideren actividades para la comunidad en el marco del museo. Ellos son parte protagonista del diseño de propuestas concretas aunque estén guiadas por las coordinadoras. Es un espacio absoluto de empoderamiento. Un proyecto innovador, magnífico”.
— Es decir, los ensamblados investigan, gestionan…
— Graciela: Ellos hacen. Por ejemplo, las charlas del año pasado fueron todas con invitados especiales que tenían que ver con esa temática. Cada charla implicaba armar un contexto, un marco teórico. Investigar sobre los temas, sobre los invitados, armar una entrevista. Y, por supuesto, abierta al público. La idea de público que tenemos no es un público pasivo, sino participativo. El público está invitado a sumar su voz. A generar propuestas.
— Y este año, ¿cuál va a ser el tema protagonista?
— Graciela: Lo que pasa es que no podemos adelantar tanto, como es una construcción con ellos. Es un trabajo muy horizontal el que hacemos. Este año sí lo que hicimos fue una participación dentro del Festival de la Palabra, teníamos la Biblioteca Abierta (…) dentro de esa actividad hicimos el “Ensamble cuentero”…Tiene que ver con estos espacios de compartir con el otro.
— Angélica: Y de lectura. Hubo una linda participación del público. Los ensamblados fueron a contar poesías, cuentos, poemas, distintas literaturas de autores argentinos a públicos variados.
— Trabajar en el proyecto ¿las cambió en algún sentido?
— Angélica: Es como que te da una nueva visión de cómo envejecer, de cómo querés ser cuando seas grande. Yo quiero ser como ellos, porque hacen de todo. No quiere decir que ahora no lo haga, pero te digo… no es la vejez que te quedas en la casa, expectante, si no que salen, se relacionan, hacen todo lo que tienen ganas de hacer, Te cambia la visión.
— Graciela: Y aunque la vejez parece algo muy lejano, es algo que vamos construyendo, desde ahora, Eso es algo que uno no dimensiona. Yo, con mi edad, todo lo que estoy haciendo ahora va a decretar cómo voy a envejecer, con todas las acciones que hago. Es decir, todas las acciones que estoy haciendo, mi construcción como persona van a perfilar la vejez que tendré. Mucho de lo que nos hablaba Sol (Rodríguez) es esto de construir redes, es algo tremendamente importante
— ¿Cuál es un recuerdo de “oro” de ensamblados?
— Angélica: A ver, lo pensemos juntas. La satisfacción de cuando se logra las actividades y se plantearon hacerlo de tal forma. Y esa alegría de terminar, del aplauso o de poder llegar a hacer tal actividad. Esos momentos son muy lindos, porque después nos juntamos todos, charlamos, evaluamos
— Graciela: A mí me tocó mucho la charla en donde vino Sol como invitada. La charla se llamaba “Envejecer x actitud, igual a calidad de vida”, tiene que ver con lo que nosotros trabajamos con ellos. La actitud que nosotros tomamos frente a cualquier circunstancia, justamente, tiene que ver con la forma de vivir. Si tenemos una actitud positiva, seguramente podremos vivir plenamente, bien. Parece muy pavo y muy sencillo. Y en esa charla, solamente iba a estar Sol, pero ella nos preguntó si podía traer una sorpresa. Y en el momento del evento, nos trajo a la escritora Cristina Loza. La conocíamos a ella como escritora, pero no hablando. En esa charla, todos tuvimos que sacar un pañuelo. Es un ejemplo de cómo envejecer.
— Y desde que empezaron, allá en el 2016, hasta hoy ¿cuáles son las cuestiones que las asombra, que ni se las imaginaban?
— Graciela: Cuando revisamos las fotos, hay cambios impresionantes
— Angélica: Hay cambios desde lo estético, se arreglan mejor. Personas con perfil depresivo, y vienen mucho más felices, se relacionan con un grupo, con el otro. Desde lo humano, de lo estético. De estar más interesados, motivados. De investigar.
— Graciela: Las fotos del primer año hasta ahora, lo que cambia es el semblante. Antes podías ver, tal vez, mucho miedo mientras que las de ahora son de disfrute.
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