Aunque generalmente está asociada a las obras de arte, la conservación es una disciplina que se afianza en las ciencias naturales.
La ciudad de Córdoba fue una de las sedes donde se llevaron a cabo las jornadas de Manejo y Conservación en Colecciones de Ciencias Naturales con la participación de profesionales de Argentina y de otros países, alrededor de aspectos legales, de curación, conservación e informatización de colecciones ligadas de materiales de la naturaleza.
El encuentro se llevó a cabo de manera simultánea en tres sedes: El Museo Provincial de Ciencias Naturales “Dr. Arturo Umberto Illia”, de Córdoba, en el el Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”, Ciudad de Autónoma de Buenos Aires, y en la Fundación Miguel Lillo, en Tucumán.
En el Museo de Ciencias Naturales de Córdoba, organismo que integra la red de museos que dependen de la Agencia Córdoba Cultura, se congregaron agentes de museos de Mendoza, La Pampa, San Luis, San Juan, Rosario, Santa Fe y de Río Cuarto. Además concurrieron personas que trabajan en museos escolares que tienen colecciones de ciencias, en herbarios, colecciones zoológicas, de otros museos provinciales e institutos de investigación que dependen del CONICET, como así también participantes de algunas cátedras universitarias y de la División Patrulla Ambiental de la Policía de la Provincia.
Organizadas y patrocinadas por la Fundación Williams y Potenciar Comunidades, las jornadas de conservación contaron con la participación de Nacho Legari, conservador del Museo Rivadavia, Anabela Plos, bióloga, Amandine Péquignot, experta en conservación, Yaneth Muñoz Saba, y Soledad Tancoff, conservadora.
En cuanto los factores que ponen en riesgo la conservación en un museo de ciencias, el especialista señala el factor humano, ya que en este tipo de instituciones las mismas piezas tienen uso científico y son manipuladas a menudo por los investigadores que las estudian. Los ejemplares, entonces, son tomados como materiales de uso cotidiano y a veces no se tienen en cuenta los resguardos necesarios para preservar los ejemplares de estudio en el tiempo.
“En Argentina, la conservación como disciplina académica es relativamente nueva y consiste en la preservación del patrimonio de los museos para que puede ser aprovechado por las futuras generaciones”, sintetiza Nacho Legari, miembro de la Asociación Internacional para la Protección del Patrimonio Cultural.
Un interés creciente
La conservación es una materia que se expande en la comunidad de los museos más allá de su tipología. Es una disciplina complementaria de otras funciones que cooperan en la preservación del patrimonio cultural y natural de una sociedad, como la catalogación, la restauración y la difusión.
El año pasado, se realizó en la ciudad de Buenos Aires el V Encuentro Internacional de Conservación Preventiva e Interventiva en Museos, Archivos y Bibliotecas, que reunió a más de 700 participantes de todo el país, lo cual manifiesta el auge de la disciplina.
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