La Agencia Córdoba Cultura y el Ministerio de Educación homenajearon a la Universidad Popular de Córdoba en un acto, en la Escuela Juan Bautista Alberdi
En la Escuela Juan Bautista Alberdi y ante la atenta mirada de algunos cientos de alumnos que estudian en ese establecimiento, se conmemoró la existencia de la Universidad Popular, una organización fundada en 1917 por Arturo Orgaz como una manera de proveer a las clases trabajadoras de herramientas y conocimientos prácticos en la vida cotidiana.
La Universidad Popular de Córdoba fue un modelo de enseñanza que se expandió por toda América Latina, a partir del movimiento juvenil conocido como la Reforma Universitaria de 1918. Una corriente de pensamiento que trascendió la esfera de la educación superior y se expandió a otros órdenes de la sociedad, cuyos postulados apuntaban a la democratización de las instituciones y el acceso al conocimiento.
En el acto estuvieron autoridades y representantes de la Agencia Córdoba Cultura, Escuela Paula Albarracín -primaria para adultos-, el Instituto José María Paz -nivel secundario-, la Escuela Juan Bautista Alberdi -educación primaria- y del Instituto César Milstein -secundario especializado en Ciencias Sociales y Naturales-, la Junta Provincial de Historia, la subdirección de Cooperadoras Escolares del Ministerio de Educación la Provincia. Además de docentes y una gran cantidad de jóvenes que estudian en ese histórico edificio, fundado en 1906 y considerado como un emblema de la educación pública.
Ya que en este edificio, ubicado en General Paz y Humberto Primo, funcionan cuatro instituciones educativas, la conmemoración estuvo precedida por los abanderados y escoltas de los cuatro institutos.
Luego de cantar el Himno Nacional, siguieron las glosas a cargo de dos docentes, quienes aludieron a la razón de ser de la Universidad Popular y su contexto histórico. Después se descubrió una placa que conmemora la existencia de aquella organización que funcionaba en la entonces Escuela de Niñas Juan Bautista Alberdi.
En La Segunda
Hacia el final de la ceremonia, alumnos del sexto grado arriaron la bandera tras lo cual abanderados y escoltas dejaron el patio donde se realizó el acto. Luego invitados, alumnos y docentes se dirigieron al Salón de Actos en el primer piso del establecimiento, diseñado por el arquitecto Carlos Morra.
El periodista e historiador de hechos y personajes de Córdoba, el escribano y abogado, Carlos Ighina, expuso frente a una numerosa platea de chicas y chicos, adolescentes, que concurrieron al salón para escuchar al cronista.
Carlos Ighina ofreció una exposición detallada y puso el acento en nombres propios de personajes de la cultura de Córdoba ligados al movimiento reformista, como Deodoro Roca, Arturo Orgaz, Martín Gil, José Malanca y Roberto Garibaldi.
En la parte superior de la facha del edificio escolar hay una leyenda en latín, que sirvió como punto de partida para el discurso que Carlos Ighina dio ante la platea juvenil, Liber liberat, lo que se traduce como El libro libera. Ighina describió la construcción y la ubicó en el contexto de ese sector de la ciudad, conocido antiguamente como La Segunda.
La unidad obrero estudiantil
Ighina habló del nacimiento y desarrollo de la Universidad Popular en una perspectiva histórica, cuya acción transformadora se proyectó hasta el primer gobierno de Perón con la creación de la Universidad Obrera Nacional, en 1948, y la Universidad Tecnológica Nacional, en 1950, durante la presidencia de Arturo Frondizi, sostuvo el disertante.
Para Carlos Ighina, en la experiencia de la Universidad Popular está el origen de la unidad obrero estudiantil, tantas veces repetida a lo largo del siglo XX. La experiencia, dijo, es un franco ejemplo de “la trasferencia de una idea a través del tiempo, una idea que es buena, es noble y está al servicios de la sociedad”.
La Universidad Popular brindaba clases en horario nocturno para todas aquellas personas que no tenía acceso a la educación formal. En ella se aprendían oficios y se recibían nociones de salud, higiene y derecho civil.